La violencia, se presenta de una manera u otra en todas nuestras vidas, y lo aceptamos como un hecho, como una realidad que siempre ha sido así, tal como la conocemos, y que siempre nos ha acompañado. Y así, casi sin percatarnos, comienza su justificación.
Estamos tan acostumbrados, educados y abrumados por condiciones apenas perceptibles, que perdemos noción de las acciones violentas más leves, y aquellas que son más obvias nos desagradan tanto que en ocasiones las negamos, las ignoramos y les restamos la importancia que sus consecuencias evidencian una y otra vez… quizá por doloroso.
Así, el marido o la esposa que le grita a su pareja, denigrándole de alguna manera, quizá por un simple desacuerdo o por celos, se sentirá en pleno derecho, y estará momentáneamente cegado al derecho ajeno. Igualmente quien grita o arrebata su hijo, hija, padre o madre, posiblemente queriendo castigar con palabras y acciones de desdeño, tan solo momentáneamente puede negar lo que ha hecho.
La violencia, sea cual sea su presentación o variedad, para la víctima o el perpetrador, es tan solo un acto de desesperación, un acto descontrolado que paradójicamente busca controlar –pero no lo logra ya que siempre queda algo por fuera. La violencia es una imposición abrupta de una voluntad sin considerar las necesidades de la otra persona, muchas veces más vulnerable por su situación.
Sea yo conmigo mismo, con otra persona o toda una institución contra un grupo de personas: Las secuelas de la violencia la hacen insostenible, la necesidad de cambio se torna evidente, y su curso, la mejoría a la situación es, por dicha, inevitable. Como lo podrán saber los cientos de hombres que pasan por WEM y encuentran la alternativa que buscaban...... Es muy común escuchar a muchos decir: Si tan solo hubiera venido unos años antes… ¡Bueno, aún no se ha inventado la maquina de tiempo, pero lo importante es que ahora están!
Quien pasa por WEM de una manera u otra reconoce en sí el potencial de cambio, y reconoce en los demás el apoyo que buscaba. Además busca llevar esto a su casa para construir con su familia el ambiente de respeto, apoyo mutuo y amor que les permita convivir y desarrollarse como lo desean, en un ambiente libre de violencia para ambos. No siempre es un proceso fácil, pero el compromiso lleva a los resultados.
Hoy... todos los que estamos aquí compartiendo esta celebración para nuestras madres, compartimos una meta en nuestras vidas – un propósito que nos lleva a mejorar personalmente y buscar lo mejor para las personas importantes en nuestras vidas. Muchos han recorrido ya gran parte del camino, han aprendido cosas valiosas de sí mismos, de sus parejas y de sus compañeros, y disfrutan hoy de una mayor paz interior. ¿Y porqué parar aquí?
Es el momento oportuno para dar un paso más, de tomar una posición y llevar el mensaje y el propósito más lejos. De ayudar a construir paz exterior tanto como interior.
¿Cómo?
TOMANDO UNA POSICIÓN FIRME, PRONUNCIANDONOS Y COMPROMETIÉNDONOS.
HOY LES INVITAMOS A PRONUNCIARSE EN CONTRA DE LA VIOLENCIA Y A FAVOR DE UNA CULTURA DE PAZ. CON 4 SIMPLES PASOS.
EL CUARTO PASO: Voy a empezar al revés... ya verán porqué. Este paso es exclusivamente para todas las madres. Hemos destinado una cámara de vídeo para grabar mensajes especiales por parte de madres hacia los hombres relevantes en sus vidas, como los hijos y los esposos. Manteniendo anonimato, las invitamos a compartir una reflexión positiva, en contra de la violencia y a favor de la paz, este vídeo se editará y se subirá en Internet para que otros conozcan el mensaje. Esta actividad será al final de las que siguen, y simplemente me buscan para realizara.
EL PRIMERO: Subir a tomar el voto de compromiso de la campaña de lazo blanco. El cual dice así: Yo me comprometo a nunca cometer, excusar ni quedarme callado.....
EL SEGUNDO PASO: HACIENDO FILA INSCRIBIRSE Y TOMARSE UNA FOTO.
EL TERCER PASO: Y aquí invitamos a todas las madres y mujeres. El tercer paso es pintar sus manos en la manta, firmarla y escribirle una reflexión. No se preocupen que es una pintura especial para que pintemos todos y firmemos esta manta, que nos declara juntos en contra de la violencia y a favor de la paz.
Ahora sí! Adelante los que quieren tomar el voto.
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